Hago periodismo hace más de 30 años y conservo la misma pasión del primer día. 

Más que un trabajo, siento que es una misión que me compromete con las grandes causas del país. 

El programa espera ser un espacio informativo plural. Con entrevistas políticas y humanas. Creo en la integralidad de la comunicación. 

Armar esta campaña no ha sido fácil. Me siento mal pidiendo ayuda, y no por soberbia, sino porque sé la magnitud de la crisis y me incomoda pensar que podría complicarlos aún más. Pero no puedo detenerme, menos en esta coyuntura (elecciones y episodios de corrupción) así que ya me endeudé. 

Los valores que se obtengan por la campaña serán destinados a pagar los equipos y servicios adquiridos: 

La idea es salir de deudas y estabilizarnos. Es como el empujón de partida. Confiamos en que ahora que estamos al aire contaremos con más auspiciantes y caminaremos independientemente. 

Sin duda has escuchado que “cualquier donación vale”, es verdad, si consideramos los seguidores del programa y de mis redes sociales, requeriríamos a portes pequeños pero masivos. Así, no se sentiría el “golpe”. 

¿Y si no llegamos a la meta? Pues nada, no hay plan B. Me quedaré con las deudas, estaré apretado y con algunas pesadillas pero los querré igual.